20/2/09

SUEÑOS DE TABLA HUMEDAS


Sueños de tablas húmedas que reposan después de la tempestad, augurios de aves emigrando a tu cuerpo de noches y espumas. Eres el mar de mis silencios rotos, el horizonte donde deshojo a las olas sin tocarla en los comienzos de mis manos llenas de ti. Tú me traes el recuerdo exquisito de las redes, la intemperie desnuda de las rocas, el misterio de las barcas místicas en busca de la orilla más próxima. Te observo desde un sitio seguro que solo conocen los peces y algunas gaviotas, descanso en tu modorra y me duermes en los vaivenes de tu vientre mientras respiras el oxigeno indispensable de mis besos. Sueños de tabla húmedas, lunas menguantes acelerando sus pasos sobre mi espalda, caricias con rastros de sol, epitafio para un deseo que sobrepasa las señales de lo imposible. Agua perforando a la arena, sales eternas amenazando con brotar por los poros, prontitud para el despliegue y las ganas de llegar, flotando como una promesa en la lengua a tus contornos. Contornos que miro con devoción y empeño mientras un mástil erige su distancia escapando de mis manos resbaladizas. Te he volteado en mis pupilas sin despertarte, me he refugiado como un pez en las paredes coralinas de tu gruta, abierta a los placeres clandestinos que entre mis dedos conjuro. Y el mástil ruge, estalla en fuegos artificiales decorando tus muslos vencidos.... Me refugio en la ruina, quiero respirar, volverte a voltear para saber que no sueño, para saber que estoy vivo. El mástil cae, lentamente, en mis manos yacen las huellas de sus suspiros.

1 comentario:

Leobet Garcia dijo...

Este poema nació de una imagen que dejo en netlog mi excelente amiga y poetisa:

MINA.

Seguidores

Twitter